Project Description

VIGNERONS

PAULA MICHELINI

Paula vivió toda su vida junto a las vides y los vinos, y estudió cine solo para diferenciarse del legado de la familia. Con el tiempo, sin embargo, volvió al vino enamorada de lo que lleva en la sangre: la pasión por la fermentación y la búsqueda de historias y sabores que se pueden resumir en una copa.

Cuando su padre Matías Michelini la envió a Salta para trabajar en la vendimia de un proyecto de vinos especiales que creó junto con Pancho Lavaque, Paula comenzó a soñar un vino propio. Vio el potencial en el uso de las pieles de Ugni Blanc que se habían llenado de energía del sol norteño, en un paraje soñado, y que estaban por ser desechadas. Pidió permiso y lo hizo. Se fue al extremo de la sustentabilidad e hizo 300 botellas de un vino de baja graduación alcohólica, repleto de antioxidantes naturales aportados por ese concentrado de pieles, fermentado en forma espontánea, y estabilizado solo con la ayuda del tiempo y la paciencia. 

Ávida de seguir creciendo, creó junto con su novio un proyecto que está a punto de salir a la luz, demostrando que hay una nueva figura en la industria del vino argentino.